DE BATTRE MON COEUR S´EST ARRÊTÉ(de JACQUES AUDIARD) por CARLOS VILLARRUBIA.- LATIDO EN EL CAOS(CINECLUB KONIEC)

     (Dentro del ciclo clàssics del segle XXI, presenté en el CINE CLUB KONIEC-en una animada conferencia-coloquio el film DE LATIR EL CORAZÓN SE HA PARADO del francés JACQUES AUDIARD. A petición de la web-blog de cine club KONIEC de CALAFELL-TARRAGONA escribí este texto que relaciona ritmo-imagen y memoria visual)

                                      LATIDO EN EL CAOS

                                    por CARLOS VILLARRUBIA

       
                                        El ritmo es la voz interior, eco y presentimiento de la armonía perdida . Al extraviar  la conexión con la melodía íntima, el ser humano deambula desesperanzado entre un vals de ruido y rascacielos.Todo sabe a nada y nada satisface a nadie. Perdido el paso, domina el vértigo, la trepidación, el huir por huir. Jacques Audiard despliega un mapa de personajes abatidos por la ausencia de ritmo. Corazones rotos , corazones desbocados que saben de la existencia de un mundo paralelo de belleza y afecto tras la cortina melódica de un piano, pero que pegados al alquitrán y a la nube tóxica de la codicia no pueden alzar el vuelo. Laten pero descompasados, aman pero sin dirección, observan las pacíficas calles nocturnas de París tras la ventana sabiendo que es sólo un instante fugaz dentro de una cantinela de agitaciones. El lenguaje visual de Audiard es la mirada radial, capaz de iluminar con sabiduría zonas desconocidas del hombre posmoderno. Ser incapaz de disfrutar de sus múltiples dimensiones, agarrotado en la foto-fija y que sólo concibe la pasión con el morbo de la autodestrucción. Violencia y ternura como escribía el profesor Rof Carballo, balancéandose en el límite.La añorada afectividad en la vía del "lado femenino" que el hombre suele acallar. El amor a la vida volando en el cometa traspapelado en el infinito tras la muerte de la madre; la autoridad malentendida y pesimamente transmitida en la figura del padre. Audiard dibuja a Tom como un terno adolescente, marioneta del destino que sólo por la vía de los lenguajes sensoriales- así tiene que entenderse con la pianista china- puede acceder a un sentimiento de bienestar. Como escribía el amigo Santiago Auserón, lider de Rdio Futura y ahora metamorfoseado en Juan Perro, "gracias por el ruido de fondo". Audiard seguro que ha leído el clásico de Jacques Attali, "Ruidos", porque en"De latir el corazón se ha parado" hay un claro homenaje a las música electrónica, al tecnopop que más allá de alucinaciones permite acceder a lo que Aldous Huxley calificaba como puertas de la percepción. Grados de conocimiento del ser interior que invitan al cambio y a la reconciliación con eternas armonías. Ahí conviven en el soundtrack Sporto Kontos, Telepopmusik, Black Party, Koutze Ritmo; pensamiento-ritmo como ya escribí en Álbum letras artes en mi ensayo PAISAJES DEL PENSAMIENTO-RITMO.Sí, como reconoce el poeta Antonio Gamoneda, poseemos la sensibilidad presentida de lo rítmico, la creación del sentido a partir del sonido en la estela de Poe. El latir descompasado se convierte en la desesperación excelentemente personificada en Tom(Romain Durais). Bloqueados, sin rumbo, sólo queda asistir con las manos ensangrentadas a una melodía perdida , siempre en la otra orilla, el punto de fuga a modo de Tocata de Bach. Sólo es preciso aventurarse al ejercicio de vivir emocionalmente. Encontrar el latido fugitivo en el inmenso caos. Porque el ser humano puede si recupera conexiones afectivas y repuebla el bosque de neuronas con el azúcar del sentimiento.


                                           CARLOS  VILLARRUBIA